Este otoño, especialmente lluvioso y cálido, va camino de convertirse en memorable para los aficionados a la micología, y por supuesto no había mas que pasearse hoy por la plaza del mercado de León, para ver como también los aficionados al buen yantar, disfrutan y alternan compras entre lepiotas y niscalos, entre boletus y setas de cardo, que de todo había hoy en la Plaza Mayor. Por motivos obvios, este otoño como el pasado por estas mismas fechas, publicamos una anotación sobre micotoxicología en el blog, que me permito repetir literalmente por su importancia e interés para todos los que hacemos medicina y en especial los que cubren plazas de Atención Continuada y Urgencias, el archivo .Pdf del año pasado en esta ocasión también se publica en formato "flash"
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La machacona y persistente promoción de nuestra riqueza micológica en estas fechas, empuja a cientos de aficionados a nuestros campos, a la búsqueda de esos ejemplares que se nos ofrecen en crónicas y reportajes como tentadores tesoros culinarios, desperdigados por el campo, como esperándonos para llevarlos a nuestra mesa. No obstante, todos sabemos que las setas venenosas y muy venenosas existen, pero son muchos los que creen que se encuentran solo en bosques remotos y con enanitos viviendo dentro de ellas, no saben que pueden estar muy cerca de nosotros, las setas muy venenosas pueden estar en nuestros parques cercanos, y no tienen que tener colores muy llamativos ni manchas con la señal de peligro, pues son muy parecidas a las que habitualmente recogemos y con fruición comemos. Este es el motivo por el que también llegadas estas fechas, es relativamente frecuente, que a nuestros servicios de urgencias acudan pacientes que han sufrido algún tipo de intoxicación por ingestión de setas tóxicas, que ya decimos que “haberlas, haylas”. Una gran mayoría de estas intoxicaciones, serán leves episodios de gastroenteritis o de intoxicaciones muscarínicas, que después de unas pocas horas cederán, y solo dejarán el recuerdo de un mal susto y un cierto resentimiento hacia el amigo que aseguró el manjar; pero aunque solo en contadas ocasiones, si la mala suerte ha hecho, que una Amanita faloides o una pequeña Lepiota bruneoincarnata se confundan con nuestros queridos “champiñones” o bonitos “parasoles”, tal vez la vida del paciente "penda de un hilo", y solo un trasplante hepático "in extremis" pueda salvarla. En el siguiente enlace en archivo pdf, se presenta una sesión completa sobre intoxicaciones por setas,(intoxicaciones por setas), cuyo esquema general, se basa en el tiempo de latencia desde que se ingiere las setas, hasta la aparición de los síntomas, (lo propuso el francés Dujarric de la Riviere hace casi cien años y sigue vigente).En general los síndromes de latencia breve, menos de 6 horas suelen ser leves salvo complicaciones por comorbilidad en el paciente, por el contrario las intoxicaciones con periodo de latencia prolongado, mas de 6 horas , (suelen aparecen después de 8-12 h), son de pronóstico grave o muy grave dependiendo de la especie y la cantidad y llevar a la muerte al individuo en 8 y 10 días. El peligro reside en las intoxicaciones mixtas, con distintas especies, que presentan un síndrome de aparición temprana, que nos lleve a pensar en un pronóstico leve y confiados que pronto pasara el episodio, demos el alta, sin sospechar que unas horas después, puede comenzar un peligroso cortejo sintomático que el confiado paciente, ya “visto” por el médico, minusvalore, siendo irreparable la pérdida de tiempo y demasiado tarde, cuando consciente de que el cuadro es realmente más grave de lo previsto, decida volver a urgencias. Si no se puede identificar la especie y por tanto no conocemos el verdadero alcance de una intoxicación por setas, (quien se equivocó en una especie, se pudo equivocar en dos distintas), se debe mantener en observación al paciente hasta que pasen al menos entre 12 y 15 horas desde la pérfida comida, para asegurarse de que no aparecen síntomas tardíos, descartando la aparición de un proceso realmente grave, esta es una máxima que nunca debemos olvidar.....
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La machacona y persistente promoción de nuestra riqueza micológica en estas fechas, empuja a cientos de aficionados a nuestros campos, a la búsqueda de esos ejemplares que se nos ofrecen en crónicas y reportajes como tentadores tesoros culinarios, desperdigados por el campo, como esperándonos para llevarlos a nuestra mesa. No obstante, todos sabemos que las setas venenosas y muy venenosas existen, pero son muchos los que creen que se encuentran solo en bosques remotos y con enanitos viviendo dentro de ellas, no saben que pueden estar muy cerca de nosotros, las setas muy venenosas pueden estar en nuestros parques cercanos, y no tienen que tener colores muy llamativos ni manchas con la señal de peligro, pues son muy parecidas a las que habitualmente recogemos y con fruición comemos. Este es el motivo por el que también llegadas estas fechas, es relativamente frecuente, que a nuestros servicios de urgencias acudan pacientes que han sufrido algún tipo de intoxicación por ingestión de setas tóxicas, que ya decimos que “haberlas, haylas”. Una gran mayoría de estas intoxicaciones, serán leves episodios de gastroenteritis o de intoxicaciones muscarínicas, que después de unas pocas horas cederán, y solo dejarán el recuerdo de un mal susto y un cierto resentimiento hacia el amigo que aseguró el manjar; pero aunque solo en contadas ocasiones, si la mala suerte ha hecho, que una Amanita faloides o una pequeña Lepiota bruneoincarnata se confundan con nuestros queridos “champiñones” o bonitos “parasoles”, tal vez la vida del paciente "penda de un hilo", y solo un trasplante hepático "in extremis" pueda salvarla. En el siguiente enlace en archivo pdf, se presenta una sesión completa sobre intoxicaciones por setas,(intoxicaciones por setas), cuyo esquema general, se basa en el tiempo de latencia desde que se ingiere las setas, hasta la aparición de los síntomas, (lo propuso el francés Dujarric de la Riviere hace casi cien años y sigue vigente).En general los síndromes de latencia breve, menos de 6 horas suelen ser leves salvo complicaciones por comorbilidad en el paciente, por el contrario las intoxicaciones con periodo de latencia prolongado, mas de 6 horas , (suelen aparecen después de 8-12 h), son de pronóstico grave o muy grave dependiendo de la especie y la cantidad y llevar a la muerte al individuo en 8 y 10 días. El peligro reside en las intoxicaciones mixtas, con distintas especies, que presentan un síndrome de aparición temprana, que nos lleve a pensar en un pronóstico leve y confiados que pronto pasara el episodio, demos el alta, sin sospechar que unas horas después, puede comenzar un peligroso cortejo sintomático que el confiado paciente, ya “visto” por el médico, minusvalore, siendo irreparable la pérdida de tiempo y demasiado tarde, cuando consciente de que el cuadro es realmente más grave de lo previsto, decida volver a urgencias. Si no se puede identificar la especie y por tanto no conocemos el verdadero alcance de una intoxicación por setas, (quien se equivocó en una especie, se pudo equivocar en dos distintas), se debe mantener en observación al paciente hasta que pasen al menos entre 12 y 15 horas desde la pérfida comida, para asegurarse de que no aparecen síntomas tardíos, descartando la aparición de un proceso realmente grave, esta es una máxima que nunca debemos olvidar.....